¿Estas a Disgusto?

El descontento es el resultado de una frustración prolongada, que no esta en nuestro control y que no podemos hacer nada para cambiarla y entonces llega el descontento, por ejemplo en situaciones como la pérdida del empleo, una enfermedad grave, una limitación física, sentir que el trabajo es poco redituable o la separación de la familia por motivos de trabajo, puede haber muchas situaciones en las que se presenta la falta de contentamiento. Pero déjame decirte que también esto es pecado, cuando el descontento te separa de la confianza, sabiduría y amor de Dios, porqué el descontento negativo daña tu relación con Dios, porque se presentará en períodos largos muy prolongados y no habrá cambios notorios. La forma en que enfrentes estas situaciones determinará tu carácter y tú fe crecerá. La Aceptación es la clave para salir del descontento que es resultado de la frustración, realmente entender que Dios tiene todo el control de todo cuanto nos pasa y que siempre hay una enseñanza en todo lo que nos acontece, no importa el tipo o grado de la circunstancias. Dios siempre tiene el control. La Biblia enseña la reacción de un siervo de Dios que se encontró en una de los más grandes descontentos del hombre se trata de Job La Biblia Dice: "20 Al llegar a este punto, Job se levantó, se rasgó las vestiduras, se rasuró la cabeza, y luego se dejó caer al suelo en actitud de adoración. 21 Entonces dijo: «Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo he de partir. El SEÑOR ha dado; el SEÑOR ha quitado.¡Bendito sea el *nombre del SEÑOR!» 22 A pesar de todo esto, Job no pecó ni le echó la culpa a Dios." (Job 1:20-22) me emociona pensar en la actitud de Job, su fe, su total dependencia de Dios. Hoy tal vez estamos pasando por situaciones que nos quitan el contentamiento, Job alabo el nombre de Dios en su situación, ante el descontento acepta que Dios tiene el control, alábale y pide en oración que te muestre lo que espera de ti, todos los pasos que damos en el camino, están trazados por el Señor. Entrega tu vida a Jesús es la fuente del permanente contentamiento.